Una piedrita tan solo una insignificante piedrita
me enseña como adorar al Sol en el un arido desierto de la vida...
una vida plena de Sol... un Sol eterno.
Y si alguna vez, llega la lluvia podría crecer una hermosa flor,
para acompañarse en sus soledades y en su adoración al Sol.
Sin querer poseer esa bella flor, sin importar cuanto tiempo viva junto a ella.
"Hermoso SOl: Sé que me acompañas,
sé que siempre estas allí, junto a mi.
Te doy gracias,
Quiero adorarte siempre"
Eres mi Sol
eres mi Dios
mi amado Jesus"
Candy
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